En el ritmo de nuestro día a día, la música tiene un papel protagónico al entretejer sus tonadas en el telar de la vida. Esto va más allá de escuchar una canción de fondo en una tienda o en el ascensor y es algo que trasciende fronteras y culturas, y que nos llega hondo. Sin embargo, ¿cada cuánto nos paramos a pensar en el profundo impacto que tiene la música en nuestra vida?
La música ha estado entrelazada con la cultura humana durante siglos y siglos desde tiempos de la prehistoria. La mayoría de la gente considera que la música ocupa un lugar profundo y satisfactorio en su vida. En algunos estudios se ha observado que el que nos guste una música depende de si coincide con nuestras expectativas cognitivas y sensoriales. Al escuchar una canción, lo que esperamos percibir de una estructura musical parte de los ritmos y melodías con los que estamos familiarizados. De que se cumplan estas expectativas, dependerá que nos guste o no una música.
Las investigaciones demuestran que la música desencadena emociones y sensaciones físicas parecidas independientemente de la cultura. En un estudio con 1500 participantes occidentales y asiáticos, se encontró que la música triste y suave se sentía en la zona del pecho en ambos grupos, mientras que la música bailable y alegre se sentía en los brazos y las piernas. Estos hallazgos destacan la influencia universal que tiene la música sobre el cuerpo.
Aparte de ser una fuente de placer para el cuerpo, la música tiene varias ventajas terapéuticas:
Ventajas para la cognición
La música tiene un papel importantísimo en mejorar el funcionamiento cognitivo. Escuchar música activa varias vías neuronales en el cerebro, lo que, a su vez, desencadena cambios plásticos en el sistema nervioso. Esto provoca que haya mejoras en la capacidad cognitiva como, por ejemplo, una mejor memoria. De hecho, en un estudio se encontró que cuando se pone música animada y calmada de fondo, mejoraba la memoria de los adultos mayores. Por otro lado, cuando solo se ponía música animada, mejoraba la velocidad de procesamiento. En estudios que se han hecho en niños y adultos, se ha encontrado que el aprendizaje de otros idiomas se aceleraba cuando el material (nuevas palabras y frases) se presentaba como canciones.
Ventajas para las emociones
¿Quieres mejorar tu estado de ánimo? Proponte escuchar música animada. En un estudio de dos semanas, los participantes a quienes les dijeron que se levantaran el ánimo al escuchar 12 minutos de música animada todos los días dijeron sentir un mayor aumento de la felicidad que quienes solo escucharon la música sin la intención de cambiar su estado de ánimo.
Asimismo, la musicoterapia puede ayudar a tratar los síntomas de depresión. En varios metanálisis se ha encontrado que la musicoterapia ayuda con la depresión, ya que escuchar música provoca que se libere dopamina, lo que nos hace sentir bien; así como endorfinas, que son hormonas que mejoran el estado de ánimo y alivian el dolor.
Ventajas para la pérdida de peso
Hay varias formas en que la música puede traernos ventajas a la hora de perder peso. El primer mecanismo por el que puede ayudarnos es reduciendo el consumo de calorías. Si comemos en un restaurante con luz tenue y música suave de fondo, se puede reducir el consumo de alimentos en cerca del 20 %. La hipótesis de los investigadores es que el ambiente y la música evocan un entorno tranquilizador, que ayuda a sentirse más relajado, comer más lento y estar más en sintonía con las señales de saciedad del organismo.
Por el contrario, si escuchamos música con un ritmo rápido, nos sentimos más motivados para hacer más ejercicio. En un estudio que se hizo con participantes que montaban bicicleta estática a una velocidad que decidían ellos mismos, cuando el ritmo de la música se aceleraba, los investigadores observaron que aumentaba la velocidad, la distancia recorrida y la fuerza ejercida.
Además de lo dicho antes, escuchar música, especialmente música relajante, reduce el estrés. Esto es esencial para bajar de peso, ya que cuando hay un alto estrés de forma crónica, el cortisol permanece elevado y el apetito también aumenta como resultado de esto. Por lo mismo, aumentan las ansias o antojos de comidas altas en calorías y grasas, lo que es un obstáculo para perder peso.
Ventajas para el alivio del dolor
Escuchar música también puede ayudar para aliviar el dolor crónico y agudo. Los pacientes que sufren de fibromialgia primaria, un síndrome en el que hay dolor crónico, notaron que disminuyó considerablemente, no solo el dolor, sino también la depresión cuando el tratamiento era una intervención con música. De igual forma, un metanálisis demostró que la música reducía el dolor y el uso de medicamentos en el posoperatorio en personas a las que se había operado quirúrgicamente. También notificaron sufrir menos ansiedad y sentirse más satisfechas.
Uno de los mecanismos detrás de la propiedad analgésica de la música es la capacidad de esta de distraernos del dolor. Escuchar música también hace que sintamos en general más bienestar y reduce la percepción de dolor.
Cómo puedes incorporar la música en tu vida
No tienes que ser un músico profesional para que disfrutes de los efectos positivos de la música en tu vida. Con tan solo algunos cambios en tu vida cotidiana, tú también podrás aprovechar las ventajas sanadoras que tiene la música.
Algunas actividades que puedes incluir es elegir musicales el día que quieras verte una película, poner música cuando hagas tu meditación por las mañanas o la noche, cantar en la ducha, escuchar una lista de reproducción mientras friegas los platos o haces ejercicios, ir a un concierto en tu cita o incluso apuntarte a un coro de tu zona. ¡Las posibilidades son infinitas!
Al incorporar la música en nuestro día a día, podemos desvelar un lenguaje universal que no solo enriquece nuestras experiencias, sino que también tiene capacidades terapéuticas y mejora nuestro bienestar cognitivo, emocional y físico. Deseo que la fuerza de la música te acompañe.
