Es posible que no te des cuenta, pero la dopamina es la que lleva la batuta cuando hablamos de sensación de bienestar. ¿Cómo es posible que un neurotransmisor sea tan vital para sentir gozo?
Cuando te despiertas por la mañana y te llega el aroma del café fresco en la cafetera, probablemente te emociones. Esta anticipación es la dopamina en acción.
Si te dan un aumento de sueldo en el trabajo, tu sensación de logro probablemente se vea acompañada de una serie de sensaciones mentales y físicas placenteras. Esa es la dopamina.
Cuando disfrutas de tu música favorita, te ríes con amigos o tienes un gran subidón de adrenalina mientras practicas un deporte. Esos son los efectos de la dopamina.
¿Qué es la dopamina?
La dopamina es un neurotransmisor que envía señales entre neuronas y es precursora de la adrenalina. Tiene una función importante en una gran variedad de funciones cerebrales y corporales que son fundamentales para el éxito, como la motivación, la memoria, la atención, el aprendizaje, la creatividad y el estado de ánimo. Cuando sentimos los efectos positivos de la dopamina, nos sentimos emocionados y energizados.
Sin embargo, si tenemos la dopamina baja, nos podemos sentir cansados y apáticos, y presentar adicciones, problemas de memoria, alteraciones de sueño e incluso enfermedad de Parkinson.
¿Cuál es la relación entre la dopamina y la adicción?
En los años cincuenta, algunos científicos diseñaron un experimento en el que colocaban electrodos a lo largo de la vía de la dopamina en el cerebro de las ratas. Cuando las ratas entraban en rincones específicos de sus jaulas, recibían una descarga eléctrica. Debido a la incomodidad de las descargas, los científicos pensaban que las ratas evitarían entrar en las zonas donde recibían descargas, pero ocurrió justo lo contrario.
En lugar de evitar las descargas, las ratas ansiaban la dopamina con tanta intensidad que seguían entrando para recibir la descarga hasta setecientas veces en una hora.
Esta conducta compulsiva también se puede observar en las personas, por ejemplo, en los casos de abuso de sustancias o de adicción a las apuestas. Si haces algo en exceso, puede pasar que no te sientas tan bien después, pero la subida de dopamina puede ser tan intensa que desees más.
La liberación rápida de dopamina es tentadora y es posible obtener una dosis en todos lados en nuestro mundo moderno. Algunos ejemplos de fuentes de liberación rápida de dopamina son la cafeína, el alcohol, los videojuegos, la adicción a las redes sociales, la alimentación impulsiva, el trabajo mecánico o las compras compulsivas.
¿Cómo generar dopamina?
Si queremos conseguir un bienestar mental, emocional y físico, debemos aumentar la dopamina de formas saludables y equilibradas que nutran nuestra autoestima y cultiven las conexiones con los demás. A continuación, verás algunos aspectos a tener en cuenta para generar dopamina:
Gratitud sincera
¿Alguna vez has sentido cómo te atraviesa una sensación cálida de hormigueo de amor y compasión cuando sientes gratitud por alguien o algo que pasó en tu vida?
Sentir gratitud por todas las bendiciones que tienes en la vida es una forma sencilla, económica y práctica de aumentar la dopamina. También sirve para ver tu vida en perspectiva cuando las situaciones se ponen difíciles.
Una forma fácil de mantener el hábito de valorar las cosas es escribir un diario de gratitud. Recuerda que cuando lleguen los momentos difíciles y tengas problemas para pensar en cosas que valores, está bien sentir gratitud por placeres sencillos como abrazar a tu mascota o la sonrisa de un desconocido.
Atención plena en el día a día
Centrarnos en el momento presente y practicar la autorreflexión nos ofrece enormes ventajas. Cuando prestamos atención al entorno, calmamos nuestros pensamientos y nos concentramos, tenemos un estado mental de calma que nos permite relajarnos y recargarnos completamente.
La práctica de mindful framing y la atención plena no solo nos ayudan a desprendernos del estrés, sino que en las investigaciones se ha demostrado el potencial que tienen para aumentar la liberación de dopamina.
Puede ser tentador encender el televisor para ver un programa basura que te distraiga de los problemas cotidianos en lugar de retirarte a pensar y reflexionar sobre tus ideas y experiencias. A la larga, llevar a cabo un ritual de autorreflexión te hará generar dopamina de una forma más positiva y profunda.
Ejercicio frecuente
No hay necesidad de apuntarte a una clase de spinning que vas a odiar si eso no es lo que te gusta. Sin embargo, encontrar una opción de ejercicio que de verdad te guste puede aumentar la dopamina y darle un impulso a tu bienestar físico.
Independientemente de que sean artes marciales, danza o tirarle la pelota a tu perro, tu mente y cuerpo te lo agradecerá porque la dopamina se libera cuando el corazón late fuerte.
Si quieres otra dosis de dopamina, combina tu actividad con una meta (como aumentar continuamente tus pasos diarios).
El ejercicio tiene muchos otros efectos fantásticos en tu vida. Quizá pierdas un par de kilos, te veas más saludable y conozcas a amigos con los que tengas cosas en común durante tu actividad.
Alimentación saludable
Aunque el azúcar y la comida rápida pueden ser tentadoras si quieres más energía, la subida de ánimo que te provocan estos alimentos dura poco y suele acompañarse de un bajón de energía.
Nuestro planeta está repleto de frutas frescas, hortalizas y fibra de las que podemos disfrutar todos los días. ¿Sabías que un intestino sano parece estar relacionado directamente con una cantidad equilibrada de dopamina?
Algunos alimentos que pueden reforzar tu dopamina son las manzanas, los plátanos, la remolacha, el pollo, los huevos y el queso. Así que empieza el día con una deliciosa tortilla con queso o una ensalada de frutas frescas para mejorar tu estado de ánimo desde temprano.
La vida es una fuente dinámica y continua de experiencias e ideas, y la función de la dopamina es movilizar tu cerebro y tu cuerpo para que sientas motivación, expreses la creatividad y alcances tu máximo rendimiento. No desperdicies ese precioso elixir al alterar tu minucioso proceso alquímico de neurotransmisores y hormonas. Exprésate compasión y deja que los procesos naturales del organismo prevalezcan, sin optar por «endulzantes artificiales».
